Las 11 Mejores calles para ir de compras en Paris

“Ir de compras” es una expresión que utilizamos a menudo y abarca en realidad múltiples actividades.

No se trata únicamente de dirigirse a un lugar para adquirir algo, sino sobre todo de recorrer, pasear, conocer, explorar, comparar, observar, abrir los sentidos y jugar a ser otros, distintos, a vestirnos diferente, a volvernos alguien nuevo por un rato.

Más aún, si se trata de calles que nos invitan a visitarlas tanto por sus comercios como por su ambiente, entornos y estéticas singulares.

Champs Élysées

El nombre de esta avenida no es casual. Los Campos Elíseos eran, en la mitología griega una de las partes del inframundo, allí donde iban los virtuosos y los héroes. Se trata de un lugar de felicidad y disfrute, cuyo equivalente cristiano sería el cielo.

La Avenida de los Campos Elíseos abarca casi 2 kilómetros de esa bendición: los pasatiempos. Dejarse llevar entre escaparates (vidrieras) se vuelve algo natural.

La avenida está rodeada por hileras de árboles que dan sombra y marco natural al paraíso urbano.

Champs Elysees con alumbrado navideño y Arco del Triunfo al fondo

Los Campos Elíseos abarcan desde la Plaza de la Concordia hasta la Plaza Charles de Gaulle (antes llamada de la Estrella). Turismo, lujo, elegancia, cultura, arquitectura: todo se combina en su belleza de postal diurna o nocturna.

En cuanto a compras, prácticamente no hay marca que no esté en la Avenida. Todas tienen su local, desde francesas clásicas como Lacoste, Weston o Cartier hasta internacionales como Nike, Adidas, Zara o Sephora, entre muchísimas otras.

Se pueden encontrar allí tiendas de ropa urbana o de elegancia y lujo, relojerías y joyerías, ropa deportiva, perfumes… Pero también gastronomía, desde cafés, bares y brasseries para recargar energías hasta restaurantes exclusivos.

También se puede apreciar la arquitectura y la veta cultural de la Avenida. Teatros como el Rond-Point, el Marigny o el des Champs-Élysées; galerías como el Grand y el Petit Palais, o cines como el UGC y el Gaumont merecen sin duda su mención.

Avenida Montaigne

Siguiendo con los nombres, algunas veces se corresponden y otras veces, no tanto. La Avenida Montaigne debe su nombre a Michel de Montaigne, el escritor renacentista conocido por crear el ensayo y llevar una vida apartada.

Curiosamente, se trata de una Avenida donde confluyen en forma exclusiva las boutiques de joyería y alta costura. Nada de ascetismo, sino lujo y elegancia son los principales atractivos de esta privilegiada arteria capitalina.

Torre Eiffel desde el Puente del Alma

La Avenida Montaigne conecta los Campos Elíseos con el Puente del Alma. Ofrece las postales por excelencia de París como ciudad de la moda y la luz. La vista de la Torre Eiffel, las tiendas y la arquitectura resultan increíbles.

Entre las marcas que podemos encontrar en la Avenida, cabe destacar: Vuitton, Saint Laurent París, Prada, Christian Dior, Chanel, Gucci, Chloé, Céline… La calle por excelencia del brillo de la moda, sin dudas.

Rue Saint-Honoré

Cerca de la Avenue Montagne y los Campos Elíseos se encuentra la rue Saint-Honoré, más estrecha pero no menos esplendorosa que las anteriores. El dicho “lo bueno viene en frasco chico” se aplica perfectamente a esta calle.

A lo largo de 2 kilómetros de longitud y unos 14 metros de ancho, la Rue Saint-Honoré es sinónimo de lujo. Grandes marcas de perfumes, joyerías, marroquinería y alta costura se suceden en un marco de elegancia total.

Edificios Calle St Honore Paris

Además, se pueden encontrar numerosos restaurantes, bares y brasseries para descansar, tomar o picar algo y recargar energías en el paseo.

Por último, no falta la posibilidad de admirar muchos de los monumentos icónicos de París, como el Louvre, la Comédie Française, el Palais Royal, la Place Vendôme… ¡Luz, cámara, acción!

No es casual que la famosa canción parisina Ou est ma tete? (¿Dónde está mi cabeza?) de Pink Martini comience así: “J’ai perdu ma tête/ dans la rue St. Honoré” (perdí mi cabeza en la Rue Saint-Honoré).

Y es que esta calle no es para menos.

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Triangle d’Or

Entre la Avenida George V, los Campos Elíseos y la Avenida Montaigne se forma el famoso Triangle d’Or (Triángulo de oro), situado en el distrito 8 de la capital francesa.

El triángulo de oro se llama así porque, precisamente, brilla y vale como paseo tanto como el metal que lo nombra. Los Campos Elíseos y la Avenida Montaigne son sinónimos de exclusividad, y el Triángulo reafirma ese estilo.

Además de las tiendas de alta costura, ropa, perfumes y joyerías, en la zona del Triángulo se puede apreciar la arquitectura y esplendor de edificios como el Hôtel Fouquet’s Barrière, el Place Athénée o el Artcurial, entre otros.

A las marcas ya mencionadas en la Avenida Montaigne y en los Campos Elíseos, cabe agregar: Levi’s, Hermès, Swarovski, Valentino, Nina Ricci, Fnac, H&M, Tommy Hilfiger, Versace… Y la lista apenas comienza.

Haussmann Boulevard

El Boulevard Haussmann extiende su elegancia a lo largo de más de 2,5 kilómetros, desde la Avenida de Friedland (cerca de los Campos Elíseos) hasta el Boulevard Montmartre (cerca del museo Grévin).

Además de puntos de interés como la casa de Marcel Proust (en el número 102), el Boulevard Haussmann posee enormes almacenes para ir de compras.

El Printemps Haussmann es uno de ellos, situado entre los números 64 y 70 del Boulevard homónimo. Atractivo y abarcativo, su imponente superficie de 43 500 m² está repartida en tres edificios y 27 plantas.

Fachada Printemps en Navidad

Los tres edificios de este almacén son: Printemps de la Mode (de la moda: nueve plantas), Printemps de la Beauté et de la Maison (de la Belleza y la Casa, once plantas) y Printemps de l’Homme (del Hombre, siete plantas).

Las Galleries Lafayette Haussmann constituyen el otro punto de compras ineludible del Boulevard. Emblemáticas y monumentales, estas galerías de 10 plantas forman uno de los almacenes de compras más grandes de occidente.

También en el Boulevard, para alternar entre compras y descansos, se pueden visitar edificios como la Ópera Garnier, el museo Jacquemart-André o simplemente caminar por su extensión y admirar las bellas fachadas.

Rue de Rivoli

Entre los distritos 3 y 4 y a lo largo de 3 kilómetros se extiende la muy parisina y atractiva Rue de Rivoli. Esta calle invita a ir de compras y pasear, admirar el entorno, dejarse llevar, tomar y picar algo de día o de noche.

Pintoresca, agitada, transitada, glamorosa, trajinada, animada… No alcanzan los adjetivos para designar el movimiento de la Rue de Rivoli. Es que tiendas, restaurants, bares, comercios, todo lo que se nos ocurra lo encontramos allí.

Calle Rivoli Paris con nubes

La calle resulta ideal para esas compras de último momento, para los regalos, para el tiempo libre de la improvisación o el simple gusto de obsequiarnos algo. Al menos, un paseo transitado o un café tranquilo entre la gente.

A lo largo de la Rue de Rivoli, entre compras y paseos, podemos disfrutar de vistas y visitas al Louvre, al Barrio Medieval de Saint Paul, el ayuntamiento u Hotel de Ville o un calmo paseo por los Jardines de las Tullerías.

¿Qué más se podría pedir?

Boulevad Saint Germain

A cada lado, árboles en perfecta simetría, edificios históricos y tiendas de todo tipo. A lo largo de tres distritos, más de 3 kilómetros del Boulevard Saint Germain ofrecen un paisaje urbano y puntos de interés para todos los gustos.

Moda, libros, muebles, gastronomía, museos y monumentos se suceden en el Boulevard Saint Germain, desde el Puente de Sully hasta el de la Concordia.

Tiendas como Louis Vuitton o Hugo Boss, cafés míticos como el de Flore y Les Deux Magots son algunos de los ineludibles de este glamoroso Boulevard.

Además de extenderse a la altura de monumentos y museos como el de Orsay y la Abadía Saint-Germain-des-Prés, para amantes de libros, está Shakespeare&company, cerca del Boulevard escenografía de Medianoche en París (Allen, 2011).

Rue du Commerce

Una de las mejores calles de compras de París, a pocos metros de la Torre Eiffel en la zona de Grenelle. La rue de Commerce o calle del comercio lleva un nombre nada casual. Es sinónimo de tiendas, comercio, oferta y demanda.

Desde el Boulevard de Grenelle hasta la rue des Entrepreneurs, la rue de Commerce ofrece tanto tiendas para ir de compras como cafés con terrazas para tomar aire y descansar del paseo.

Entre los comercios y productos destacables, vale remarcar todo lo que tiene que ver con variedades de ropa. Zapatos, camisas, vestidos, medias, accesorios, remeras. Para todos los gustos y edades.

Además de los comercios y las terrazas, cabe destacar las casitas bajas del siglo XIX que ambientan la calle y le dan el toque encantador de otro tiempo. Calle parisina por excelencia, permite a sus visitantes sentirse local.

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Rue Vieille du Temple

A lo largo de los distritos 3 y 4, por el corazón del barrio de Marais se extiende la rue Vieille-du-Temple. Antigua y estrecha, su origen se remonta al siglo XIII y su actualidad permite caminar por una variedad de atracciones.

Plaza del barrio les Marais Paris
Plaza del barrio de Marais

Resulta ideal para ir de compras a una zona cuyo encanto radica en lo particular más que en lo masivo. Es recomendable visitarla en horario de alguna infusión o comida entre compras, ya que los cafés son encantadores.

En la rue Vieille du Temple encontramos que pequeños comercios y diseñadores jóvenes o independientes conviven con tiendas de moda tradicionales, joyerías, galerías, perfumerías, firmas consagradas.

También cabe destacar la curiosa, interesante arquitectura que rodea la calle. Conviven edificios clásicos del siglo XX con algunas casas de siglos anteriores. Alrededor, parisinos y turistas pasan y pasan. Ideal para fotos.

Rue des Rosiers

Empedrada, peatonal, colorida, acogedora, anacrónica, singular, la Rue des Rosiers o calle de Los Rosales se encuentra en el distrito Marais. Muy cerca de la Rue Vieille du Temple, en un recorrido que recomendamos unificar.

La Rue des Rosiers se sitúa en el centro del barrio llamado extraoficialmente “el Pletzl” (en yiddish, “pequeño lugar”), el barrio judío no oficial. Desde su nombre irradia ese carácter a la vez íntimo y exterior, de calle histórica.

Fue hace relativamente poco tiempo que esta calle comenzó a hacerse conocida por la moda. Ahora bien, no alberga solamente tiendas clásicas, sino sobre todo pequeñas boutiques y salas minimalistas de exposición.

Vale mencionar, en este punto, otra particularidad de la calle. Como sus comercios no siguen el calendario cristiano sino el judío, la Rue des Rosiers se vuelve un punto de encuentro obligado los domingos y la navidad.

Place Vendôme

Place Vendôme equivale a joyería, perfumería, moda, regalos, libros, lujos y exclusividad. Situada en el centro de París, centrada en la columna u obelisco Vendôme, en la plaza podemos encontrar a los más famosos joyeros, como Cartier y Chanel, entre otros.

Cuadrada y abierta, rodeada de edificios típicos del urbanismo parisino, la Place Vendôme invita a respirar París en todo su esplendor de ciudad de la moda.

Place Vendome con cielo azul

Vecina de la rue Saint -Honoré, en la Place Vendôme se ofrecen escaparates, vidrieras, exposiciones de productos hasta llenarnos los sentidos. Ideal para un día despejado, para tomar aire y recorrer las distintas tiendas tomando aire en la plaza y su arquitectura.

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